ESCÁNDALOS PARA SOBREVIVIR…….
¡QUE CONSTE,…SON REFLEXIONES!
POR SÓCRATES A. CAMPOS LEMUS.
Hace años, el oficio de “arriero” era aplicado a los “transportistas” de mercancías en mulas que se llevaban por los caminos reales en el país, y de ahí, salió aquello de que: “CUANDO EL ARRIERO ES PENDEJO, LE ECHA LA CULPA A LAS MULAS” , ahora, los verdaderos “arrieros” se aplican a los que mueven gentes en los mítines y actos políticos, y también, cuando fallan, pues se dice que : “cuando el arriero es pendejo, le echa la culpa a las mulas”
Ahora el país se encuentra atento a los cambios que se generan en los principales centros del sindicalismo, claro que ya es tiempo para muchos de que al cambio no de gobierno sino de sistema, los mecanismos se transformen, el sindicalismo “charro” que tanto funcionó en otros años, ahora, es un freno a los tiempos actuales, y es por ello que en este campo se tienen que dar los cambios, no por voluntad ni movilizaciones de los trabajadores que son como las mulas mansas y bien educadas, sino que se les tiene que picar desde fuera, para que así reaccionen y, cuando menos, avienten patadas.
Los grandes sindicatos se generaban al amparo del poder político, era vital hacerlo, por ello, hace algunos años escribí que los empresarios le deben dar gracias a Don Fidel Velázquez, porque más que ser un lñider obrero se comportaba como un líder empresarial, y logró que la estabilidad política sindical se mantuviera por años y no se produjeran movimientos que desestabilizaran al país ni a los intereses empresariales. El último gran intento se generó con el movimiento Vallejista y terminó en una enorme represión, lo mismo sucedía con los médicos y con los maestros. Sin duda, los tiempos evolucionaron de tal suerte que agrupaciones como los petroleros, tuvieron en sus filas a un hombre que le entendía bien a la política de movilizaciones y de presiones: Joaquín, Hernández Galicia, “la Quina”, y durante muchos años mantuvo los privilegios y los famosos recursos de la Comisión de Contratos que obligaba a la empresa y a los contratistas a aportar el dos por ciento de los contratos de obras para que el sindicato, a su vez, pudiera capitalizarse y realizar acciones “empresariales” que dejaban ganancias y control en los trabajadores, así de tal suerte y con la variación de precios y de producción que se generaba en la época, la “Quina”, entró al estire y afloje cuando Miguel de la Madrid, por medio de Carlos Salinas de Gortari, suspendía muchas de las prebendas dadas al sindicato petrolero, por ello, en un momento ,se generó aquello de que: “Si le va bien a los petroleros le va bien a México y le va bien, a usted, señor presidente” y en los tiempos convulsos, donde Cárdenas encabezaba los intentos del cambio, se dice que la Quina jugó un papel muy importante al ser financiero del movimiento encabezado por Cárdenas, de tal suerte de que después de varios intentos para parar ese financiamiento y acciones en contra del candidato Salinas de Gortari, incluyendo, aquella publicación de “un Asesino en la presidencia”, y al fracasar los intentos de buscar platicar con la “Quina” y llegar a acuerdos políticos, se le enviaba el mensaje de que: “Se debe acordar que su función está en el campo del sindicalismo y no de la política nacional, si se sale de la raya sindical, pues que se atenga a las consecuencias” y pues las consecuencias fueron la toma de su casa donde existían armas puestas por alguna mano “pachona” y se generaba la detención de las cabezas del sindicato. Muchos pensaros que al hacer esa acción, después de hacer una intensa campaña publicitaria para desprestigiar a la Quina y su labor, que se vendrían paros en las secciones sindicales, y para sorpresa del mismo gobierno, la única sección que paraba era la de Salina Cruz, cuyo dirigente fue puesto en prisión, y así, también, se dieron cuenta, por medio de los escándalos en la comunicación, de las joyas que portaba Barragán Camacho y de la fortuna que mantenía en la cajuela de su carro y desaparecieron cientos de millones de las cajas de la Comisan de Contratos, y en otras secciones, ranchos, tiendas, empresas, cajas de ahorro y otras cosas más que estaban en poder de los dirigentes sindicales, y se dieron los cambios que vemos hasta hoy, cuando se da otra crisis y se perfilan los cambios, sin las brutalidades ni los conflictos generados en los tiempos de la Quina.
Así tomó el poder del sindicato Carlos Romero Deschamps, y no hay duda que, cuando menos, fue un factor vital para el manejo y las relaciones con el gobierno y las políticas de la época, claro, como todas las gentes del poder salieron a relucir sus debilidades en favor de su hijita y sus viajes y de su hijo y sus gustos caros, y al final de cuentas, no perdió la cabeza y no generó conflictos que pudieran poner en riesgo mayor la débil fuerza de PEMEX, seguramente jugó papeles importantes como los han jugado los hombres de poder en los tiempos políticos, y esto lo hace depositario de grandes secretos que si se conocieran, seguramente, se generarían una enorme crisis nacional e internacional. Yo no sé si canalizó recursos hacia el PRI con las instrucciones presidenciales de la época, donde le dieron las facilidades para hacerlo, no sé si por su conducto se generaron recursos que fueron canalizados a la campaña de Peña Nieto u otras acciones, de lo que si estoy convencido es que no realizó ninguna acción en contra de AMLO, de su política o de sus actividades, y tan es así que, independientemente de lo que se diga ahora, viene un cambio sin provocar grandes conflictos ni generar movilizaciones que pongan en riesgo la estabilidad de la empresa petrolera. Seguramente Carlos Romero es depositario de grandes secretos políticos dentro del complejo mundo de los energéticos, pero de lo que nadie debe dudar es que, sin duda, ha sido un factor importante que no se dejó utilizar para empañar o complicar la campaña de AMLO a la presidencia, así que, ahora, los nuevos tiempos definirán nuevas acciones, y sin duda, escándalos, porque sin ellos, no estamos a gusto los mexicanos…pan y circo.